domingo, 27 de enero de 2013

Capítulo 1 - Parte 2

Entrada la noche, la chica pasea por la calle, yendo hacia el bar donde horas antes, había conocido a un joven camarero.
Al llegar pudo escuchar:
-Pues claro que vendrá, la necesitamos.
La chica no le da importancia y entra en el bar y suena la campana. El bar esta vació, con todas las sillas y mesas recogidas y desde el pasillo una voz dice:
-Lo siento estamos a punto de cerrar...
-El joven camina por el pasillo y ve que la persona que ha entrado es la chica con la que había quedado y dice:
-O perdona. Pensaba que era un cliente.
-¿Quién dice queno lo sea y me quiera tomar algo?
-Creía que habías venido por mi invitación.
-¿Invitación? A si claro, tu eres el de esta mañana. Se me había olvidado- Dijo sonriendo inocentemente.
-¿Ah si? ¿Entonces te has arreglado tanto para tomarte algo en un bar?- Pregunto mientras le devolvía la sonrisa.
-No tonto, me he puesto así para que me compenses por lo de esta mañana.- Dice mientras se acerca al joven -¿Y bien? ¿En qué has pensado?
-Pues había pensado en llevarte a cenar a un restaurante de por aquí, espero que te guste la comida hindú.
-Pues no sabría decirte, nunca la he probado.
-Ya veras que rica esta. Dame 2 minutos, me cambio y nos vamos.- Dice mientras vuelve por el pasillo quitándose el delantal. Mientras, la chica se da la vuelta, saca su móvil y empieza a escribir un mensaje:
-Todo va según lo planeado.

-Vamos a cerrar, vuelva mañana.- Dijo una voz grave.
La chica se sobresalto dando un grito ahogado y casi se le cae el móvil del susto. Giro sobre si misma y vio al camarero que le había timado. Frunció el entrecejo y dijo:
-Estoy esperando a... a su compañero.
-¿A qué compañero?
-Pues... no se como se llama, pero estaba hace un momento aquí, le ha tenido que ver.
-No he visto a nadie.
-¿Cómo que no? Pero si...
-Salga de aquí señorita.- Le interrumpe el hombre.
-Oiga, es imposible que no le haya visto, es un chico joven, pelo corto, moreno, con...
-No he visto a nadie así en horas.- Volvió a interrumpir -Salga de aquí, se lo estoy pidiendo amablemente.
La chica se empieza a mosquear y dice.
-Mire, he quedado aquí con él. Hemos estado hablando y ha salido hace 2 minutos. A tenido que cruzarse con él si o si.- Dice mientras señala el pasillo. -Me ha dicho que le espere aquí, que se iba a cambiar...
-Le repito que no he visto a nadie. Todos los que trabajan aquí ya se han ido hace rato.
-Pero si...

-¡No insista más. Aquí solo estamos usted y yo! ¡Y por tercera vez, salga de el bar ahora mismo!
La chica se queda pensando unos segundos, mirando al camarero. Da la vuelta lentamente, guarda el móvil en el bolso y se dirige a la puerta.
Al salir, mira al rededor hasta que ve un banco y se dirige a él. Se sienta y empieza a llorar mientras busca en su bolso un pañuelo para limpiarse.
Pasa el tiempo y por la calle casi no pasa gente. Se tranquiliza un poco, se limpia las lagrimas y se levanta aguantando el llanto. Comienza a caminar, pero un golpe seco la deja inconsciente y cae al suelo.

jueves, 24 de enero de 2013

Capítulo 1 - Parte 1

Al abrir la puerta, la campana resonó en todo el bar, haciendo que todos sus integrantes volviesen la mirada. La chica, haciendo caso omiso, camina hasta una mesa vaciá, pasando por la barra donde el camarero más viejo la sigue con la mirada mientras limpia un vaso. Al llegar, arrastra un poco la silla, se quita el bolso de encima y se sienta cruzando las piernas y con la mirada fija en la televisión.

El camarero se acerca y abriendo la libreta con un giro de muñeca, pregunta:
-¿Qué va a tomar?
Coge la carta y echando un rápido vistazo, dice:
-Pues de primero, tráigame sopa, de segundo solomillo y de beber una mixta.
El camarero apunta todo, coge la carta y sin mediar palabra da la vuelta sobre si mismo, dirigiéndose a la barra para informar al cocinero. Ella, sin hacer demasiado caso, acerca el bolso y empieza a rebuscar en él hasta que una de las noticias le hace quedarse inmóvil.

-Un incendio obliga a evacuar dos casas en el barrio de...
-Parece que no han encontrado lo que buscaban
Susurra mientras esboza una sonrisa malvada...

La chica come tranquilamente y cuando termina, se levanta, se dirige a la barra, donde la espera el mismo camarero que la sirvió.
-¿Cuanto es?
-12 con 50.
-Menudo atraco- Dice en voz baja mientras busca la cartera en el bolso

Pone el dinero en la barra mientras el camarero la mira con uno de sus brazos apoyado en la barra. Recoge el dinero, lo cuenta rápidamente, cierra la caja y sigue limpiando vasos.
La chica coge el bolso y sale del bar. Empieza a buscar un número en su móvil cuando un grito hace que se de la vuelta.
-¡Disculpa! Trabajo en el bar y no he podido evitar escuchar lo que te ha costado.
La chica se queda mirando al joven estrañada y antes de que pueda articular palabra el camarero le dice:
-Creo que te ha cobrado 12,50 ¿Verdad? Pues tengo que decirte que te han timado.
-¿Cómo?
-Si mira, el camarero que te ha atendido se va a jubilar la semana que viene, así que infla un poco los precios a la gente que no ha venido nunca, con lo que consigue algo más de dinero para cuando deje de trabajar
-¿Y qué pasa con el dinero que me ha quitado?
-Que tal si te pasas a eso de las 8 por aquí y te invito a algo en compensación ¿Qué me dices?

La chica le mira detenidamente mientras el joven sonríe. Hasta que finalmente le devuelve la sonrisa y le dice:
-Vale, a las 8 estaré aquí, pero que sepas que me tendrás que compensar gratamente.
-No se si podre hacerlo con el sueldo que tengo, puede que le robe la idea a mi compañero jaja. Bueno, aquí a las 8, no me hagas esperar mucho.
-Oh, solo un poquito.
El joven sonríe y se da la vuelta cuando la chica le dice:
-Espera, no sabes ni como me llamo.
-Mejor, me gusta la gente con algo de misterio.
Dice entrando en el bar. La chica se ríe y sigue buscando en su móvil. Se lo pone en la oreja y dice:
-¿Tienes lo mio? Puede que lo necesite antes de lo esperado.

jueves, 10 de enero de 2013

Esta aquí

Después de meses de golpes y ruidos, al final se ha presentado ante mí. Era de madrugada, dormía plácidamente cuando, al abrir los ojos y me lo encontré ahí, delante de mi, un hombre alto y delgado, con una pronunciada calva y pelo canoso. Con un aura plateada y medio transparente me dijo con voz profunda me llamo por mi nombre y me dijo: “¿Donde están las llaves?” Si, resulta un poco cómico, pero en ese momento casi no pude ni moverme y mucho menos articular palabra. Sacando fuerzas de flaqueza, intente coger la sabana con los pies, pues al verlo delante de mi, un escalofrió recorrió todo mi cuerpo, dejándome completamente helado. Mire a los pies de la cama, me encogí sobre mi mismo para alcanzar la sabana y cuando volví la mirada, ya no estaba. Había desaparecido del mismo modo en que vino, sin hacer el mas mínimo ruido. Ahora se lo que busca, pero aún quedan muchas preguntas por hacer ¿Qué llaves quiere? ¿Para que? Y posiblemente la más importante ¿Por donde empezar a buscar?

Perdón

Después de casi un año sin poner nada nuevo, vuelvo al blog pidiendo disculpas a los lectores y lectoras que me sigan, que espero que haya, aunque sean pocos jaja. Hablando en serio. Espero venir más a menudo por aquí y postear aunque sea una vez al mes por lo menos. De nuevo pido disculpas y gracias por seguir aquí